Paternidad a los 87 años
Con 87 años, Alberto Cormillot se ha convertido en un modelo de vitalidad. Este médico y comunicador sigue inmerso en numerosas actividades que abarcan desde su rol como director de la carrera de nutrición en la Universidad ISALUD, hasta su participación en el programa Cuestión de peso de El Trece, y diversas intervenciones en Radio Mitre y en redes sociales. En el ámbito personal, junto a Estefanía Pasquini, su esposa desde 2019, Cormillot se dedica a criar a su hijo Emilio, quien tiene tan solo cuatro años.
La llegada de Emilio ha supuesto para él un cambio en su forma de paternar y ha añadido nuevas actividades a su compleja rutina, que, según confiesa, disfruta enormemente. “Voy a buscar a Emilio al colegio y juego con él”, asegura mientras disfruta de un mate.
Una rutina intensa
Cormillot revela detalles de su día a día: “Me acuesto a las nueve de la noche y me levanto a las cuatro de la mañana. Luego voy a la radio, trabajo hasta las 9:30 y después me dirijo a la clínica, donde también gestiono mis vínculos con la universidad y diversas instituciones como la Fundación ALCO. Adicionalmente, dedico dos días a la semana al programa Cuestión de peso”.
El médico también comparte que una de las actividades que más disfruta es recoger a su hijo del colegio: “Voy a buscar a Emilio una vez a la semana, y me gustaría hacerlo dos días”, dice, revelando su deseo de pasar más tiempo con su pequeño.
Mantener la vitalidad
En la conversación, Cormillot atribuye su energía a una relación constante con la nutrición y el bienestar. “He sido muy trabajador toda mi vida, y sigo siéndolo. Hice mi carrera de medicina al mismo tiempo que comencé en los medios. Durante estos 60 años, he aprendido a transmitir las pautas de salud que practico: una alimentación adecuada, la actividad física y el control del estrés”.
Sobre su salud, Cormillot no duda en compartir su experiencia reciente con un problema cardíaco, donde rápidamente reconoció los síntomas y se dirigió al sanatorio Finochietto, donde le colocaron un stent. “Lo importante es escuchar a tu cuerpo. Una molestia puede ser una señal”, advierte.
La salud de los jóvenes
Cormillot también reflexiona sobre la importancia de educar a las generaciones más jóvenes en la salud: “El desafío radica en que el joven cree que es eterno e irrompible, lo que dificulta que adopte hábitos saludables, como una buena alimentación y el ejercicio”.
Comparten su enfoque en la crianza de Emilio, especialmente en el uso de pantallas. “El consejo del psicólogo Álvaro Bilbao es claro: si deseas ver niños felices, no asumas que eso es solo tu responsabilidad. Hay que educar, que implica hacerse también de restricciones.”
Reflexiones sobre la paternidad
Ser padre de Emilio trae consigo una nueva forma de paternidad, que incluye cambiar pañales y acompañar al niño al baño, algo que no hizo con sus hijos mayores. “Mi generación no tenía esta implicación; era tarea exclusiva de las madres”, señala. Reconoce que ahora comprende mejor la responsabilidad de ser padre, especialmente dado su contexto de vida y los desafíos que enfrenta por su edad.
Expresa que el amor que siente por Emilio es recíproco y destaca el vínculo especial que han formado, disfrutando de actividades juntos, desde ir a la pileta hasta participar en sus clases de baile.
Visión hacia el futuro
Cormillot comparte que no teme a la muerte, sino que se enfoca en Emilio. “Desde que he tenido cáncer, he comprendido que tengo que disfrutar cada día”, reflexiona, enfatizando la importancia de vivir el presente.
Con varios proyectos en mente, como un par de libros y un deseo de viajar en familia, Cormillot parece decidido a aprovechar al máximo cada día. “No me falta motivación ni ganas de seguir aprendiendo”, concluye.
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