Renuncia de Angela Rayner
La vice primera ministra británica y ministra de Vivienda, Angela Rayner, presentó su renuncia al gobierno y al Partido Laborista el pasado viernes al mediodía. Esto se debió a un informe que confirmaba que había pagado menos impuestos de los que correspondían por la adquisición de una vivienda. Esta situación ha generado una crisis significativa para el primer ministro, Sir Keir Starmer, quien ahora se enfrenta a la necesidad de reestructurar su gabinete.
Informe del asesor ético
La investigación fue realizada por Sir Laurie Magnus, Asesor Independiente sobre Normas Ministeriales desde diciembre de 2022. En su informe, que fue presentado a Starmer, se indicó que Rayner actuó de buena fe durante los trámites de su operación inmobiliaria. Aunque destacó su “cooperación plena y abierta” en el proceso, también afirmó que había infringido el código que regula la conducta de los ministros.
- “Ella creía haber confiado en el asesoramiento legal recibido”, explicó Sir Magnus.
- Sin embargo, alertó que ignoró una recomendación que advertía que el asesoramiento no era experto en materia fiscal, sugiriendo en cambio buscar asesoramiento especializado.
Sir Magnus concluyó que, a pesar de actuar con integridad, el hecho de no haber liquidado correctamente el impuesto de Stamp Duty Land Tax (SDLT) y que esto se revelara solo tras un rigoroso escrutinio público, implicaba una violación del código ministerial.
Contexto personal de la situación
Angela Rayner, que proviene de entornos sindicalistas y de clase trabajadora del norte del Reino Unido, ha sido miembro del Parlamento por Ashton-under-Lyne desde 2015 y fue elegida como líder adjunta del Partido Laborista en 2020. Se identificó como socialista y figura del sector moderado del partido, posicionándose como una posible sucesora de Starmer.
La ex vice primera ministra había adquirido un departamento, pero no se realizó el pago de 42.000 libras en impuestos de timbre que eran exigibles. Rayner argumentó que recibió un consejo legal inadecuado que condujo a este error.
Desarrollo de la investigación
Rayner admitió su error al notificar que había pagado menos impuestos de los que correspondían por una nueva propiedad en Hove después de consultar a un Consejero de Hacienda. Inicialmente, responsabilizó a su asesoramiento legal antes de acudir a las autoridades correspondientes.
El medio conservador The Telegraph publicó el 28 de agosto que la vicepremier había eludido el impuesto de timbre adicional que suele aplicarse a las segundas residencias. A pesar de que Starmer había expresado su apoyo a Rayner, afirmando su orgullo por trabajar con ella, su renuncia se tornó inminente tras el escándalo.
Reacciones y consecuencias
La renuncia de Rayner ha impactado de manera severa el liderazgo de Starmer, que intentaba llevar a cabo una reorganización de su gabinete poco antes de la conferencia del Partido Laborista. Con la renuncia de Rayner, se espera una carrera para su reemplazo como vicelíder, electo por los miembros del partido.
La líder conservadora Kemi Badenoch expresó que “Gran Bretaña se merece algo mejor” y criticó a Starmer por no haber tomado acciones más decisivas contra Rayner. Además, la firma de abogados a cargo de la compra del piso de Rayner, valorado en 800.000 libras, aseguró no haber cometido ninguna infracción relacionada con el incidente.
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